Desarrollar la autonomía en los niños es tarea fundamental para convertirlos en personas resolutivas y seguras de sí mismas capaces de desenvolverse de manera eficaz con el resto de la sociedad.
Muchos padres en el acto tan genuino de querer cuidar a sus hijos les dotan de una sobreprotección que les limita en su vida diaria y no les deja crecer íntegramente ni aprender de sus errores.
Si se fomenta el sentido de autonomía crecerán con confianza en sí mismos, felices y con ganas de conseguir todos sus sueños. ¡Te contamos cómo hacerlo!
Cómo fomentar la autonomía de los más pequeños
Establezcamos sus responsabilidades
Debemos asignarles labores como hacer la cama, cepillarse los dientes, hacer los deberes, etc. Los niños tienen que tener sus responsabilidades en el hogar y no podemos caer en el error de asumirlas por ellos. De esta manera se convertirán en personas independientes y responsables.
Permitamos que exploren por sí mismos
Dejemos que exploren el mundo por sí mismos; esto desarrolla sus capacidades de cara a la sociedad y ganarán seguridad en sí mismos. Debemos proporcionarles los medios necesarios para que desempeñen sus tareas. Respetemos su independencia y ofrezcamos la seguridad de nuestra compañía cuando nos lo pidan.
Establezcamos límites
Hagámosles saber las reglas de comportamiento, tanto en el hogar como en la sociedad. Comuniquemos, siempre desde el respeto, lo que han hecho mal y las posibles consecuencias de sus actos. Esto les convertirá en personas totalmente conscientes con sus formas de actuar.
Mantengamos una comunicación asertiva
Establezcamos una comunicación abierta con ellos, valoremos sus opiniones y hagámosles sentir que son igual de válidas que las nuestras. Hay que tratar a los niños siempre desde el respeto y el amor. Asimismo, respetar el estado anímico es crucial, tal vez un día no le apetezca ser tan “autónomo” y quiera sentirse más arropado, entonces brindemos la calidez de nuestra compañía. No todo tiene que seguirse tan “a rajatabla”, sino lograr un equilibrio saludable entre lo uno y lo otro.
Respetemos sus esfuerzos
Apoyemos sus logros y animémosles a seguir creciendo como personas. Confiemos en sus capacidades y elogiemos cada pasito que den, por pequeño que sea; esto reafirmará su autoestima y determinación.